sábado, 4 de julio de 2009

Nos resulta imposible escapar del encuentro de Dios. En efecto, todo viene de él y a él vuelve, pero desgraciado aquel que no está revestido del traje nupcial, porque será expulsado a las tinieblas exteriores (Mateo xxII 13). Pero: ¿que de nosotros es expulsado? Porque solo Dios es real.

Abbé Henri Stéphane

No hay comentarios:

Publicar un comentario